La asamblea de la RFEF ha respaldado este mediodía todas las propuestas presentadas por el presidente Luis Rubiales. Tanto en lo que afecta a las cuentas del 2018 y el presupuesto para este año 2019 como también los nuevos estatutos En el apartado económico, son 85 los asambleístas que han dado el OK a la propuesta federativo además de 10 abstenciones. En lo relativo a la forma estaturia, donde ha habido más debate, han sido respaldado con 86 votos a favor, 12 en contra y una abstención. 
 
Precisamente en el debate sobre la propiedad de los derechos comerciales y de explotación de la competición es donde se ha suscitado es donde ha habido más controversia y cruce de opiniones entre algún asambleísta y el secretario general de la RFEF. 
 
Los nuevos estatutos incluyen en su artículo 5 relativo a las competencias de la RFEF nuevos apartados que algunos organismos entienden que no se ajustan a la legalidad pero que, sin embargo han sido aprobados. Especialmente el apartado donde dice textualmente: “Organizar las competiciones oficiales de ámbito estatal, sin perjuicio de las competencias propias de la Liga Nacional de Fútbol Profesional”. 
 
Pero es en el siguiente párrafo donde radica el foco de conflicto y dice lo siguiente: “A estos efectos, ostenta la plena titularidad de los derechos sobre dichas competiciones y en su explotación comercial sin perjuicio de lo previsto en la legislación vigente para las competiciones profesionales y los derechos e intereses legítimos de los clubes deportivos, de los futbolistas, de los entrenadores y de los árbitros miembros de la federación”. 
 
Desde las asociaciones entienden que con este apartado la RFEF quiere asumir la explotación de todos los derechos de las competiciones que están bajo su tutela (Segunda División B, Tercera División, fútbol femenino y fútbol sala), empezando por los derechos audiovisuales. 
 
En esta línea entienden ellos va también el artículo s del mismo artículo 5 que dice lo siguiente: “La comercialización de los derechos que le son propios en las competiciones de su titularidad y en especial la comercialización de los derechos audiovisuales en conformidad con el Real Decreto Ley 5/2015 y los reglamentos y acuerdos que adopte la RFEF como consecuencia de los mismos y de la legalidad vigente”.  
 
Pero la modificación de estatutos presentada por la asamblea por la RFEF a los asambleístas recoge muchos más cambios. Dentro del artículo 5 sobre sus competencias, al margen de controvertido apartado sobre los derechos, recoge incluso la posibilidad de “encomendar la gestión de las competiciones profesionalizadas que formen parte de la RFEF”, es decir que podrían encomendar a empresas externas la organización de competiciones que tutela la RFEF.  
 
En esta misma línea va la modificación del artículo 9 donde redunda que “la RFEF podrá abocar la delegación de competencias en la organización de las competiciones que hubiere delegado en el ámbito territorial cuando resulte necesario para la eficiencia en la organización de las mismas o cuando se ponga en peligro el principio de igualdad ente todos los territorios”. 
 
En el artículo 11 de coordinación con la Federación obliga desde ahora a todas las federaciones territoriales a solicitar la autorización de la RFEF “para contactar con cualquier Federación miembro de UEFA o FIFA y otras entidades que estén fuera del territorio nacional, así como para llevar a cabo proyectos de carácter internacional con dichas entidades”.  
 
En el título IV relativo a los futbolistas habla de la obligación de un carnet de futbolista expedido por la RFEF para participar en torneos no oficiales organizados por la RFEF. 
 
Pero donde sin duda hay grandes cambios es en el capítulo de los órganos de la RFEF con cambios respecto a las funciones de la actual Junta Directiva y crea dos nuevos órganos como son el Comité de Auditoria y Control Económico Externo o Organo de Control y Gestión de los derechos audiovisuales de la RFEF.  
 
Primero desde ahora podrán ser miembros de este organismo cualquier ciudadano español o miembro de la Unión Europea pero debe tener residencia legal en España.  
 
En el artículo 22 sobre las derechos y obligaciones de los miembros de los órganos de la RFEF incluye que todos ellos reciban “las indemnizaciones correspondientes por gastos en las cuantías normalizadas y generales por las funciones desarrolladas en el seno de la Federación”. Indemnizaciones que fijará la Asamblea en una de las nuevas competencias que se atribuye este organismo en estos nuevos Estatutos.  
 
Otra de las grandes novedades radica en los nuevos nombres que le otorga a los órganos disciplinarios. Así el Comité de Competición pasa a llamarse de Competición Profesional cuando afecta a Primera y Segunda y No Profesional en en resto de categorías tuteladas por la RFEF incluido la Copa del Rey y Supercopa. El Comité de Apelación pasa a llamarse también órganos disciplinarios de segunda instancia.  
 
Se crea además el Comité de Nacional de clubes de fútbol profesional, el Comité Nacional de la competición profesionalizada del fútbol femenino que forman parte los clubes que participan en las competiciones profesionalizadas en el fútbol femenino o el Comité Nacional de Fútbol Playa. Al margen, y como ya contamos en SPORT el pasado viernes, este lunes está previsto que vea luz verde la modificación del Código Disciplinario para el endurecimiento de las sanciones en los insultos o menosprecio contra el estamento arbitral con multas de hasta 30.000 euros, cambios todos ellos que deben trasladarse ahora al CSD para que sean aprobados por la Comisión Directiva del CSD.